martes, 25 de enero de 2011

¿Y tú, qué le dirías?

El domingo quedé con un par de amigas para tomar un café y despejar un poco el embotamiento y amodorre que tenía fruto de la resaca.

[Para aquellos que me siguen con cierta asiduidad, sí, sigo a dieta, pero he sido muy clara con el gordólogo/acupuntor: yo renuncias, sí, sacrificios, los justos. Y un par de copitas el fin de semana son im-pe-pi-na-bles.
Así que me tomé dos gin-tonic el sábado.
........
Bueno, 3.
Jo.]

Me encantan esas charlas con las amigas (con las amigas íntimas, las de verdad). Charlas sinceras, de desahogo, con humor y con ánimos.

Como si de una terapia de grupo de tratara, al más puro estilo "Bridget Jones", cada una contamos lo que nos ha pasado, bueno o malo y lo ponemos en común, para aprender de ello, para dar una visión diferente, para animar...o simplemente escuchamos, y ya está. Con humor y muchas, muchas risas.

En esta ocasión nos juntamos en una cafetería, de esas acogedoras que se han puesto de moda, con sofases y colores cálidos y grandes tazas de cafés/tés/bebidacalientequeseteocurra [todo muy "friends" oyesss]. Allí estabamos 11, Reina y yo. Poniéndonos al día de los acontecimiento navideños [porque hay que ver lo rápido que pasa el tiempo! Por las puñeteras Navidades se te pasa un mes sin ver a la gente en un abrir y cerrar de ojos!]

Y que había de nuevo? pues no mucho en realidad. Sólo que tanto 11, como Reina, se habían suicidado.

Sí, sí: suicidado.
Y no, no estaba teniendo un encuentro en la tercera fase con sus espíritus flotando en el ambiente [ni me he vuelto loca...bueno a lo mejor un poco, pero no hasta ese punto]
Lo que pasa es que ambas dos habían decidido poner las cartas sobre la mesa [par de machotas], y coger al toro por los cuernos [que mal rollo dan siempre unos cuernos, no?] Si, claro, estamos hablando de "hombres/muchachos/zagales/chavales/matxos/tíos", o cómo quérais llamarlo. [Hay que ver el peligro que dan un grupo de treinteañeras hablando de hombres, no? Ríete tú de un aquelarre...]

Por un lado estaba Reina, con una espinita clavada desde hace tiempo. Una de esas relaciones que te marcan y que te dejan huellica. La historia no era reciente, sino que habían pasado ya varios años, y ella había tirado para adelante con su vida, teniendo, con no mucha suerte [pa'que nos vamos a engañar] sus pequeñas historias entre medias. Pero, ah! herramientadeldemonio, alias "facebook", hizo que sus caminos se encontraran de nuevo:
Él solicita amistad. Ella acepta con cosilla en el estómago. Él escribe en su muro. Ella rememora el tiempo pasado y le contesta. El vuelve a escribir un mensaje bastante críptico [doy fe]. Ella se tira 30 horas para interpretarlo, y le contesta. A ella se le despiertan sentimientos que creía superados. Él propone cita. Ella acepta.
Total, que cuando se ven el tema está así: él tenía pareja (de hecho había vuelto con una exnoviacomplicada). Reina podía haber optado por un ataque "estilo banzai" o por una estrategia más sibilina (en plan: vamos a liarnos poco a poco para intentar que termines dejando a tu novia/exnovia por mi).
Pues no.
Reina, después de comprobar en su cita, que la química seguía latente (avalado por acercamiento físicos por parte de él), y que había un "algo" no resuelto, tuvo un par y le dijo: "Mira X, sé que tienes pareja, y por eso, yo no voy a llamarte, ni voy a liarme contigo porque sí. No me gustaría que a mi me lo hicieran si fuera tu pareja. Pero sí que me gustaría intentar nuevamente lo nuestro, y saber si puedo ser más que una amiga para ti, así que quiero saber si a ti te gustaría intentarlo"
.............
Atiende.
Toma del frasco, carrasco.
No me digáis que eso no es tenerlos cuadrados.
Él se quedó a cuadros (alagado y a cuadros), y se lo pensó. Y al cabo de unos días, le dijo que no.
Dentro de lo que implica que te digan que no, Reina, ya sabe a qué atenerse,  y se ha quedado tranquila. Esa espinita ha desaparecido.
OLÉ por ella.

Por otro lado estaba 11, con una historia mucho más reciente. El caso es que después de haber dejado una relación de años, se había liado con alguien del trabajo (meec, error!!) [muchacho al que, por otros amigos, yo ya conocía, que el mundo es muy pequeño] y el muyayo en cuestión es rauro, rauro, rauro... [creo que en la RAE viene su foto al lado de la definición de rauro]
La historia: se gustan, tontean, se lían. Él es raro. Se comporta de manera contradictoria. Él no quiere compromisos, aunque tampoco ella se los ha pedido.

[Inciso y tema para futuro post: ¿por qué determinados muyayos se piensan que nosotras las féminas vamos en busca y captura de un marido/novio/pareja que sea el padre de nuestros hijos, y que eso les va a cortar la tan deseada libertad que tiene como solteros?
¿¿¿???
En lo que a mi respecta, creo que tengo más necesidad de independencia y libertad que muchos....]

11 y su "algo" lo "dejan". Vuelven. Idem. Reidem. 11 se harta, y le dice: "Mira X, vale que tú tengas tus problemas y tus principios, y que debes actuar conforme a ellos, pero yo también tengo los míos,  los estoy dejando de lado, y me siento fatal por ello. Así que: hasta aquí hemos llegado con esta situación".
........
Ahora vas y lo cascas.
Él se ha quedado picueto. Y ha tenido que asumirlo.
[Aunque sinceramente yo creo que habrá 2º, 3º y 4º parte de esta historia. Ya te contaré]
OLÉ por ella.

Así que orgullosa de mis amigas estoy [uy, me ha quedado una frase muy "maestro yoda"]

Y 11, me dijo: "Y tú, Adalias? algún suicidio que confesar al respecto".

"Pues no."

Yo, al contrario que ellas, ni me he suicidado, ni mutilado, ni nada por el estilo. No hay "güebitos" [poco a poco]...y no es que yo no tenga espinitas, no. Que haberlas, haylas.

Y 11 insisitió: "Ya, vale, pero....¿qué le dirías?".

Yo sonreí. Y ellas me escucharon.

Lo dicho: me encantan mis amigas.

7 comentarios:

  1. ¡Ole, ole y ole por tus amigas! Me ha encantado. Ahí, que la vida es muy corta y no merece la pena perder el tiempo sufriendo.

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  2. Claro, claro, descubres a Reina y a 11 y lo tuyo no lo publicas xD

    Ains, pillina...

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  3. Durante un tiempo me fue bien esta historia llena de sombras. Después, empezó a canibalizarme. Hacía mucho que no lo experimentaba pero... el lado oscuro a-tra-pa. Por eso, yo denominaría el mío un suicidio de supervivencia. He tardado siglos en reunir la valentía necesaria y, a veces (he de confesar !!) añoro esa especie de adrenalina de la montaña rusa, pero romper el hielo que genera el miedo ha sacado a la 11 más auténtica, más fantástica y ha despertado en ella los mejores deseos de acción... de la BUENA.

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  4. Me han encantado los suicidios, a veces compensa lo de ir a tumba abierta...y tú, tú que le dirías?? Que no te has pronunciado, listilla, que te crees que vamos a lo loco y no nos enteramos...

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  5. Doctora, si es que tengo unas amigas que son unas jabatas!:D

    Sil, cierto:P. Pero quería que de este post fueran las absolutas protagonistas. Las admiro por el par de (piiiii) que le han echado al tema.

    11. Olé por ti, me reitero. Totalmente de acuerdo en que el lado oscuro a-tra-pa;) ahí se tiene que ser menos ton-ta-ca:P

    Bichejo, te digo la verdad?? Espero algún día suicidarme tambien y contarlo (y editar la parte que me corresponde!), y no sólo poner lo que me gustaría..que me da cosilla hasta verlo escrito (fíjate que tontaca soy)

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  6. Yo soy muy pro-suicidios de este tipo, hay que ver lo bien que sientan a menudo a la salud mental y física de la que se suicida... por no nombrar la de tiempo que se ahorra. XDDDDDDDDD

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Y tú, qué te cuentas??