Ya os mecioné alguna vez que mi otoño había sido un poco estrambótico e intenso...y para muestra un botón.
A principios de Otoño me pasó una cosa de lo más curiosa.
[Aunque desde hace tiempo ya vengo sospechando que el destino juega a los dados conmigo]
El verano fue muy bueno si se considera en su totalidad, lo único malo es que lo jodió (sí, con todas las letras) un personaje que se hacía llamar mi amigo, y que me hizo objeto de uno de los momentos más bochornosos y humillantes que haya sufrido. Debo decir que lo superé casi al momento, nunca algo tan feo fue superado tan rápido [eso me hace pensar que el muyayo no era tan importante como yo creía]. Pero como lo feo, es feo, la cosa me dejó mal cuerpo.
Y a todo esto empieza el otoño, y decido dar un paseo por esta nuestra capilandia [Speedy, que me lo has pegadoooo], acompañada de Heroïque y su amor.
Y me suena el móvil, número desconocido.
Adalias: Si?
Chico: Eeeh...hola, eres Adalias?
A: Sí, soy yo. Y tú quién eres??
C: Pues soy P.
A: Aaahhh....
[Ni p*ta idea]
P: No caes en quien soy, no?
A: Pues no, la verdad.
P: Soy P, nos conocimos en Navidades.
[Recuerdo: era septiembre. Atiende]
A: Pues chico, es que todavía no te ubico..
P: Nos conocimos un fin de semana de estos típicos de cenas de Navidad, tú ibas con tus amigos y yo con los míos y empezamos a hablar en la calle. Yo estaba fuera del país haciendo un master, te pedí el teléfono y te dije que te llamaría cuando volviese.
A: Eeeeh, vale...
P: De verdad que no te acuerdas de mi?
A: No...lo siento...
P: Vaya, no me parecía que estuvieras tan borrachilla como para no acordarte.
A: Qué???
[Ahora me llama borracha]
P: Es que le vas dando tu teléfono a todo el mundo?
[Y ahora fresca que estoy suelta como gabete!]
A: Pues no, tío, a cualquiera no se lo doy [por supuesto que me arrepiento de habértelo dado a ti!], pero creo que el que no me acuerde tiene más que ver con el hecho de que han pasado 9 meses, que quieres que te diga.
P: Ya..lo siento..
A (ya impacientada): Y qué quieres?
P: Pues...que he vuelto, y quiero verte.
Recapitulemos: estaba yo andando por la Capital, me suena el móvil, es un tío que no conozco y que dice que le dí mi móvil hacía 9 meses. Que ha vuelto del extranjero y que quiere verme.
Vale.
¿Dondé leches está la cámara oculta?
A: Vale, ya te he pillado. Es una broma. Quién te ha pedido que me la hagas?
P: Oye Ada, que no es una broma.
A: ...no puede ser cierto, es una historia demasiado rara. Y me cuesta creérmela.
P: pues no es una broma.
A: seguro?
P: seguro!
A: uhmmm y porqué quieres quedar conmigo si se supone que nos vimos un ratejo en Navidades?
P: Porque me diste muy buena impresión...me pareciste encantadora..
[Touchée. Me pilló floja. Mira que soy fácil de convencer]
A: Eeeeh...bueno, podemos quedar a tomar una caña rápida. [Aunque solo sea por ponerte rostro, hombre de Díos!]
P: Genial pues quedamos en la terraza "pitipim" a las "pititum", te parece bien? Te llamo mañana para confirmarlo, ok?
A: Muy bien, pues hasta mañana.
Todavía estaba en shock cuando colgué el teléfono.
Al día siguiente, yo seguía pensando que era una broma, o que sencillamente no llamaría para confirmar y ya. Hasta pensé que sería una broma de la radio. Pero por la tarde me llamó por teléfono de nuevo. Yo estaba alucinada. Y aterrada.
¿A quién c*ño le había dado yo mi teléfono?
Había varias posibilidades, de las cuales las mejores eran:
- Le había dado mi teléfono pensando que nunca me llamaría (alguna vez lo he hecho...lo confieso)
- Le había dado mi teléfono porque me gustaba (no lo creo, me acordaría. No es fácil que me guste alguien. En realidad, ójala fuese más enamoradiza, creo que sería más feliz)
- Le había dado mi teléfono en un estado tal que no me acordaba (Puede. No voy a decir que no. Pero mi alma nocturna hace que en esos caso cambie SIEMPRE la última cifra de mi número. Soy así de simpática)
Y desde mi punto de vista, ganaba la 1.
Como medida de precaución, le pedí a Heroïque y a su amor que me acompañaran a las cañas (avisé antes a P, para que no encontrara con mis amigos de sopetón). Y si era un psicópata? Y si era una broma? Y si no aparecía?
Así que allí que me fui a saber quién carajos era P, y si le había dado el teléfono de manera justificada.
Resultado: P apareció, primero sólo y luego un par de amigos suyos se uniron a las cañas. Resultó ser encantador (de unos 40 bien llevados) guapete, con tablas, conversación e historias y anécdotas de su vida para dar y tomar. Fue una tarde muy divertida, la verdad sea dicha. PERO sin feeling...
Así que el muyayo me llevó a casa, y en el momento de la despedida, y al comprobar que su intención era traspasar la frontera, le dije la verdad: que de momento yo no podía más que ofrecerle una amistad. y P lo aceptó. Aparentemente.
P insistió unas cuantas veces más, y yo fui mucho más clara [en realidad actué como me gustaría que actuasen conmigo. Porque donde no hay, no hay. Y mareando la perdiz solo consigues que se pegue una hostia, con perdón]
Pero, y eso es lo saco de bueno de toda esta historia:
1. Lo lastimadica que se quedó mi autoestima y mi confianza, se vió compensado por el hecho de que una persona se acordara de mi después de tanto tiempo.[Porque a todos nos gusta gustar, y quien diga lo contrario, miente]
2. A pesar de que no estaba el horno para bollos, me di la oportunidad de conocer a alguien nuevo, que luego nunca se sabe.
3. Tuve el valor de afrontar la situación y decirle que no a tiempo, para evitar confusiones y malos entendidos. [Porque no se trata de tener cualquier pareja, y un novio a toda costa, sino de conocer a alguien que te guste y te haga sentir ese cosquilleo tontorrón en el estómago, que existir, existe. Doy fe]
Así que, desde entonces, creo que la ley de la compensación en este sentido existe, y así se me ha ido demostrando, porque compensaciones (en todos los aspectos)ha habido unas cuantas...unas para bien y otras no tanto, pero bueno, esa es la sal de la vida, no??? [Que de lo contrario sería taaaaaaaaaaan aburrida ]
¡FELIZ FIN DE SEMANA![Que compenséis mucho y para bien jijiji]
PD. Y perdón por el post tannnnnnn largo que me ha quedado....ya me callo...
Completamente de acuerdo con la letra azul del punto número 3 de las cosas positivas que sacaste de esta historia.
ResponderEliminarFeliz fin de semana, chica encantadora ;)
Pues sí, igual que nos pasan cosas malas también nos toca de vez en cuando algo bueno. Y a mí también me parece que lo de quedar con este chico fue bastante positivo, al fin y al cabo, ¿no le tienes que gustar realmente a una persona para que guarde ocho meses tu número? XD.
ResponderEliminarSil, ya sabes: "mejor sola que mal acompañada", además creo que con mis "amigos" (los físicos y los internautas) nunca estoy sola:D. Y en el amor nunca hay que conformarse, no?;) Feliz fin de semana bonica;)
ResponderEliminarDoctora, aunque no hubo feeling no me arrepiento nada de haber quedado con él, todos nos merecemos una oportunidad!XD
Un besico!!! (y enhorabuena otra vez por esos 10,000:D)
Es bonito que siga acordándose de ti, y aunque no haya llegado a nada, por lo menos es un subidón de autoestima no??
ResponderEliminarBich, sí que es bonito sí:) Y yo necesitaba esa palmadica en la espalda:) Siempre trato de sacar algo positivo (mare, parezco la friki del positivismo! XD)
ResponderEliminarjajaja, pero Adalias, es brutallllllllllll, después de nueve meses.. Y tan subidón de autoestima!
ResponderEliminarY POR SUPUESTO que había que quedar con él (con "medidas de seguridad" por si acaso, bien visto) porque si llega a haber feeling (que podría haber pasado) sería una historia genial para contar a vuestros hijos. "Pues vuestro padre me llamó después de 9 meses en el extranjero..." XDDDDDDDDD
Speedy, un poco picueta si que me quedé, :P jajajajaja
ResponderEliminarY chica, quedé con él porque por probar que no quede, y sino sale, pues no sale. Forzar no, probar siempre;) jijijiji